Hno. Manuel Monasterio Galaz, rol 1305

Información obtenida del Hno. Manuel "Chispa" Urzúa López. Vigía nao Copiapó Caldera, 2017_2018. Rol 1747


Un Zarpe a la eternidad... otro zarpe...

Rumbo a la Eternidad.

El 26 de marzo de 2018 zarpó con rumbo a la eternidad, el Hno. Manuel Monasterio Galaz, cuya navegación damos cuenta a los Hermanos:

Nació el 11 febreo de 1906, enganchado en la Hermandad de la Costa en 1974, Hermano Honorario, en sus primeros tiempos se le llamaba el Flaco, hoy Ceja Loca. Profesor. Casado con cautiva Ulda

Tres andanadas por nuestro bravo hermano Ceja Loca que fue un tremendo tripulante de la Nao Copiapó Caldera de nuestra cofradía, donde se destacó por su espíritu fraterno, buen humor y ser un excelente hermano, ostentó diversos cargos en su Nao, llegando a ser Hermano Honorario de su bajel.


COPIAPO, 26 de marzo de 2018

Discurso del hermano Osobuco

Fue en Marzo del año 1984, cuando llegaba a trabajar a Copiapó, que me crucé por primera vez con Manuel Monasterio Galaz en la antesala de un antiguo edificio de calle Chacabuco, recuerdo que me saludó amablemente y con un aire distinguido; se presentó y me deseó suerte mientras junto a otros personajes copiapinos esperábamos el inicio de una reunión. Luego en los próximos 34 años cultivamos una larga y placentera amistad en que compartimos el pan y la sal, debatimos ideas y viajamos por varios lugares de Chile. En el último mes cruzamos varias veces nuestros destinos, ahora en su lecho de enfermo; y en esas ocasiones recordamos amigos, historias y anécdotas. Hoy llego en mi calidad de Lugar Teniente de la Nao Copiapó Caldera a nuestro último contacto en la tierra.

HH. Manuel "Ceja Loca" Monasterio Galaz, como verás, me acompañan los que somos tus hermanos, hemos llegado a despedirte hasta este camposanto, que es el límite de las caletas que juntos hemos recorrido en este terreno litoral, y que sirve de playa al mar de la eternidad, en que estas navegando, océano eterno que nos es desconocido, y que desde hoy te acogerá, muchos hermanos te precedieron y hoy te esperan y te reciben con cariño, nosotros, lloramos tu partida y despedimos tu mortaja, la parte mortal de tu existencia, mas, sabemos que los hombres de espíritu libre poseen una parte inmortal, imperecedera, que les sobrevive en el recuerdo de sus familias, en los amigos, en los hermanos, en sus obras físicas y espirituales, en alguna carta, en algún escrito, quizás en alguna foto. Con seguridad algún colegio. Sin duda en las anécdotas, cafés, y por cierto en algún antiguo y secreto sueño de niño de tus hijos. Manuel, sabemos que tu espíritu se pasea en la Tortuga y en las Polillas, tu recuerdo también nos pertenece.

Conocemos de tu existencia como padre, esposo, abuelo, como dudar de tu actividad profesional, sabemos que perteneciste a variadas instituciones sociales, profesionales y de estudio, pero también sabemos cómo querías a nuestra institución, sabemos que la Hermandad de la Costa la tienes grabada a fuego en la piel y en la carne.

Manuel, tu que me acompañaste a despedir a varios de nuestros hermanos, sin duda sabes lo difícil y emotivo que es para mí. Flaco, un piquete de tus más dilectos hermanos me acompañan para tributarte en tu zarpe, una ruidosa y sentida andanada de tres descargas. Batería de estribor, apunten... FUEGO. Batería de babor, apunten... FUEGO. Culebrinas de proa, apunten...FUEGO. OOOORRZZZAAAAAA...